Una de las partes más importantes cuando trabajas con instrumental es la clasificación del material de laboratorio. Conocer estos principios, tanto si eres un novato o un profesional, será de gran importancia para realizar bien tu trabajo. De igual manera, se debe tener claro que cada elemento cuenta con una forma específica de manejo y uso, de esa forma incentivamos las prácticas seguras en la ejecución de los productos.
En Galileo buscamos que tengas los mejores productos pero también que cuenten con toda la información necesaria para el cumplimiento oportuno de tu trabajo. Por eso, a continuación te hablaremos sobre la mejor forma de clasificación de los materiales de laboratorio y cómo puedes utilizarla en tu propio punto de trabajo.
Tabla de contenidos
La importancia de la clasificación del material de laboratorio
La clasificación del material de laboratorio es fundamental para garantizar un funcionamiento seguro y eficiente en cualquier entorno científico, ya que una organización adecuada no solo mejora la estética del espacio, sino que también contribuye de manera significativa a la seguridad del personal y a la precisión en los resultados obtenidos. Al identificar y separar correctamente los materiales según su uso, propiedades o nivel de riesgo, se minimizan los accidentes y se evita el manejo inadecuado de sustancias peligrosas, como reactivos químicos corrosivos o inflamables.
Además, una buena clasificación facilita el acceso rápido a los equipos y herramientas necesarios, lo que optimiza el tiempo empleado en las tareas diarias y aumenta la productividad. Encontrar de manera inmediata el material requerido puede marcar la diferencia en procedimientos que demandan rapidez y precisión, y es por eso que esta organización también permite mantener en óptimas condiciones los equipos y reactivos, ya que evita su uso incorrecto o el desgaste innecesario.
Clasificación de los instrumentos de laboratorio según el material
En la clasificación de los instrumentos de laboratorio se suele optar por la practicidad, por lo cual tendremos en cuenta cierta distribución que te ayudará a conseguir dicho fin.
Metales
Debemos tener en cuenta a la hora de la clasificación del material de laboratorio que los metales cuentan con una alta conductividad eléctrica y térmica. Esto los convierte en elementos ideales para trabajos a alta temperatura. Algunos de ellos se pueden identificar como: soporte universal, pinzas de soporte, aros metálicos y mallas de abasto. De igual forma, se subdividirán según el contenido de hierro contengan.
Vidrio
En caso de que trabajes con ácido, lo mejor es utilizar materiales hechos con vidrio. Esto se debe a que poseen una alta resistencia a dichos componentes, los cuales los hacen más seguros y resistentes que, por ejemplo, el plástico. Una de las características principales de este material es su estabilidad y transparencia.
Para responder a cómo se clasifica el material de laboratorio en este caso, se puede subdividir en vidrio calentable o no calentable. En la primera categoría encontrarás el vaso de precipitado, Ertlenmeyer, tubo de ensayo. Por otro lado, los no calentables encierran las probetas, buretas, pipetas y embudos.
Porcelana
Aunque no es uno de los materiales más utilizados en laboratorios, la porcelana puede convertirse en una buena opción dependiendo del caso. Es resistente a altas temperaturas, lo que lo convierte en una opción ideal para la preparación de todo tipo de productos químicos.
Algunos de los instrumentos de porcelana que podemos encontrar son los crisoles, las cápsulas de porcelana, los triángulos de porcelana y el embudo. De igual manera, debemos tener en cuenta si la porcelana es esmaltada o no, ello nos hará saber los grados de temperatura que puede soportar. La porcelana esmaltada tolera temperaturas de 1.050 °C, mientras que la no esmaltada soporta hasta los 1.350 °C
Material volumétrico
Existe un material de laboratorio un tanto curioso y este es el volumétrico. A grandes rasgos, es aquel que tiene un indicador de volúmen en el recipiente, lo cual ofrece una medida cercana de sustancias químicas que debemos calcular para algún tipo de análisis. Aunque parezca complejo, la verdad es que uno de los ejemplos más comunes es el matraz aforado, que se suele utilizar en gran número de investigaciones.
Clasificación de material de laboratorio según su función
Materiales de contención
Incluyen aquellos diseñados para almacenar, medir o transferir sustancias, como vasos de precipitados, matraces aforados, buretas y probetas, cuya función principal es contener líquidos o sólidos en volúmenes específicos y garantizar la precisión durante los experimentos.
Materiales de soporte
Estos materiales ofrecen estabilidad y soporte durante los experimentos, donde algunos ejemplos comunes son los trípodes, anillos, pinzas y soportes universales, los cuales son fundamentales para montar equipos o sostener recipientes de manera segura.
Materiales de calentamiento
Se utilizan para calentar o mantener sustancias a una temperatura específica, donde se encuentran los mecheros Bunsen, planchas de calentamiento y crisoles de porcelana.
Materiales de medición
Este grupo incluye aquellos destinados a medir parámetros como volumen, masa o temperatura, y algunos ejemplos dentro de esta clasificación pueden ser las balanzas analíticas, termómetros, pipetas graduadas y buretas.
Materiales de seguridad
Su finalidad es proteger al usuario y prevenir accidentes en el laboratorio, donde se incluyen guantes, gafas de seguridad, mascarillas y duchas de emergencia.
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